Ian Richards, de 46 años y residente del Condado de Kent (Reino Unido), va a pasar el período navideño detrás de las rejas. Su sentencia —de 18 meses de prisión— se debe a su fantasía creativa a la hora de adornar su árbol navideño. Para prepararse de cara a Nochebuena y llevar la atmósfera festiva a su casa no vio otra opción que cultivar una planta de cannabis de 1,5 metros de altura.
Cortó el ramaje para que la planta se pareciera más a un abeto tradicional y la decoró con coloridos adornos. Desafortunadamente, los policías que fueron a registrar su casa no compartieron su sentido del humor. "Usando cannabis como árbol navideño, Richards demostró un desprecio total hacia la ley", comentó Derren Dennett, uno de los agentes que investigó el caso.
Dennett detalla que, aparte del 'abeto' tan particular, en uno de los dormitorios descubrieron una fábrica sofisticada de cannabis, con una decena de arbustos, aunque de tamaños mucho más moderados. Según la Policía, Richards insistía en que todas estas plantas las plantó para su uso personal, sin embargo el argumento no funcionó. "La fábrica obviamente tenía potencial para producir una gran cantidad de marihuana. Al cerrarla, hemos prevenido que en las calles aparezca una gran cantidad de droga", afirma Dennett.