En su última sesión del año, el Senado uruguayo aprobó una ley para despenalizar el aborto en las primeras doce semanas de gestación.
El proyecto impulsado por el oficialista Frente Amplio (FA) fue aprobado por 17 votos a favor y 14 en contra, y pasará a la Cámara de Diputados para su debate, donde el oficialismo será mayoría el próximo año.
Según la normativa, “toda mujer mayor de edad tiene derecho a decidir la interrupción voluntaria de su embarazo durante las primeras doce semanas del proceso gestacional”, con un plazo mayor en caso de que haya riesgos para la salud de la madre.
La senadora del FA, Mónica Xavier, apuntó que lo que se busca con esta ley es crear “un mecanismo garante para que la mujer que no puede proseguir con su embarazo, tenga las mismas garantías que la que sí lo hizo”.
Además, la legisladora insistió en que el proyecto busca impulsar la educación sexual para evitar que el aborto sea considerado “un método anticonceptivo”.
A pesar de estar penado por la ley, en esa nación sudamericana cada año se producen más de 30,000 abortos, según cifras oficiales, aunque en realidad podrían ser el doble, señalan organizaciones no gubernamentales. Asimismo, recientes encuestas indican que el 63% de los uruguayos están a favor de que se despenalice el aborto.
De aprobarse esta ley en la Cámara de Diputados, Uruguay se unirá a otros países de América Latina como Cuba y Puerto Rico, o la Ciudad de México, donde el aborto ya fue despenalizado.