Rusia cambia su doctrina militar
El Consejo de Seguridad de Rusia ha terminado de trabajar en el proyecto de la nueva doctrina militar del país, declaró el director del servicio, Nikolái Pátrushev; así lo anunció en una entrevista concedida al periódico oficial, Rossíyskaya Gazeta. El documento toma en consideración los nuevos desafíos de la actualidad, como el cuidado de los recursos humanos y el terrorismo internacional. Según el funcionario, será aprobado por el Presidente de Rusia antes de fin de año.
La doctrina tiene un carácter defensivo, subrayó Pátrushev. Sin embargo, el proyecto incluye la posibilidad de que Rusia pueda aplicar las armas nucleares para frenar la agresión con las armas ordinarias y, además, para asestar un golpe preventivo.
“Ciertamente intervenimos contra la decisión de cualquier conflicto por medio militar sin hablar de la posibilidad de utilizar armas atómicas. Siempre hemos sido un socio consecuente y fiel en cuestión de desarme y la no proliferación nuclear. Rusia y Estados Unidos ya han reducido mucho sus arsenales desde la entrada en vigor del Tratado de No Proliferación Nuclear (1970). Confirmamos que estamos preparados para avanzar, pretendiendo la idea de un mundo no nuclear. Sin embargo, es necesario que no solo Rusia y los Estados Unidos rechacen este tipo de armas, sino que otros países, miembros del "club nuclear", sigan su ejemplo”, dijo.
Los autores del documento prestan una atención especial al surgimiento de los nuevos desafíos geopolíticos. En particular, la lucha armada por los recursos de combustible y energía, reclamaciones territoriales, expansión de la OTAN, difusión de las armas y terrorismo internacional. Todos ellos se califican como potencial peligro militar.
También la nueva doctrina subraya la importancia del desarrollo del Ejército ruso. “Se ha determinado la prioridad principal: los Cuerpos Militares deben equiparse de armas y dispositivos militares, especiales y modernos capaces de reaccionar operativamente a las nuevas amenazas, además de una mayor movilidad”.
Según Pátrushev, la doctrina consiste en la introducción y tres capítulos. En la primera parte, titulada “Los peligros y amenazas militares”, se describen los riesgos militares y el carácter de los confictos armados a los cuales Rusia podría ser incorporada. Los autores hacen hincapié en el uso de varios tipos de armas durante las hostilidades, incluso armas de gran exactitud, empleando nuevos principios físicos, basados en los sistemas biocibernéticos y, además, la incoporación de aparatos aéreos y marinos autónomos. El segundo capítulo de la doctrina, “La política militar de la Federación Rusa”, consigna que la misión principal del país es la prevención de los conflictos militares. La tercera parte se dedica a las preguntas sobre la mejora del complejo militar-industrial ruso.
La nueva doctrina será la tercera versión de este documento militar en Rusia. La primera fue aprobada en 1993, y la segunda en 2000.