El estado del capitán ruso del barco pesquero Thai Union 3, herido por los piratas somalíes, empeoró gravemente.
El capitán fue herido en la mano izquierda el 5 de noviembre después de que los piratas secuestraran el barco Thai Union 3. Posteriormente los propios piratas lo llevaron a un hospital del puerto de Haradhere en la costa somalí para que fuera tratado de sus heridas. “Le prestaron los primeros auxilios, pero al parecer no de forma suficientemente profesional. El estado del capitán continuaba empeorando y ahora despierta serias dudas”, dijo el coordinador del Programa de Asistencia a Navegantes del Este de África, Andrew Mwangura.
Mientras tanto, los secuestradores continúan asegurando que nada amenaza la vida y la salud del capitán. El pesquero, de bandera tailandesa y armador singapurense, fue secuestrado el 29 de octubre en el Océano Índico y obligado a dirigirse a un puerto de Somalia. Entre los miembros de la tripulación hay 23 ciudadanos rusos.
Por otra parte, también se ha conocido que entre los tripulantes ucranianos del barco español Ariana, igualmente secuestrado por piratas somalíes, hay una niña de 12 años. Ricardo Blach, patrón de otro barco español, el Alakrana, recientemente rescatado de los piratas, la vió cuando llevo al Ariana alimentación, medicamentos y combustible.
“Recuerdo sus ojos azules. Me duele mucho no haberla traído conmigo. Su madre me suplicó que me la llevara. Le dije que no podía. En su barco, el Ariana, había 12 piratas. En el mío, el Alakrana, 30”, cuenta Blach en su diario. El patrón del Alakrana también recuerda con rabia el episodio de la joven cocinera del Ariana, que fue violada por los piratas.