Portahelicópteros francés atracó en San Petersburgo
Comenzó la visita de carácter profesional del portahelicópteros francés clase Mistral a la base naval de la flota rusa en el mar Báltico, ubicada en los alrededores de la ciudad de San Petersburgo. La visita de los marinos franceses durará cuatro días.
Al mismo tiempo, no se descarta que especialistas de la industria marítima rusa y representantes del Ministerio de Defensa de este país aprovechen el atraco de la nave para conocerla mejor. Varios analistas relacionan la visita del buque a San Petersburgo con el deseo de la Armada Rusa de adquirir de Francia un portahelicópteros de asalto anfibio de su misma clase, así como la licencia de fabricación de barcos de este tipo.
Por su parte, el Ministerio de Defensa de Francia confirmó el interés de Rusia de adquirir un portahelicópteros de la clase Mistral.
El comandante de la Armada rusa, almirante Vladímir Visotski, confirmó anteriormente que Rusia sostiene negociaciones sobre la compra de un portahelicópteros a Francia. Visotski señaló que el nuevo navío aumentará la capacidad de combate de la Armada rusa. “Valga como ejemplo lo sucedido en Georgia en agosto del año pasado. Ese buque hará en 40 minutos lo que se hizo en 26 horas en aquella ocasión”, dijo el almirante.
Durante la visita, marineros rusos y franceses organizarán diversas actividades profesionales. Además de las actividades propiamente navales, los marineros franceses participarán en las ceremonias conmemorativas de los 65 años del fin del sitio de Leningrado (actual San Petersburgo) en años de la Segunda Guerra Mundial.
Dentro de las actividades en honor de la fecha conmemorativa, los marineros franceses visitarán el cementerio Piskariovo, lugar en donde yacen los restos de las víctimas del sitio.
Del 15 de septiembre de 1941 al 27 de enero de 1944 la ciudad de Leningrado fue completamente cercada por las tropas nazis. Durante los 900 días de duración del sitio de Leningrado murieron más de 700.000 personas según las cifras oficiales, la mayoría de hambre y frío. Las cifras no oficiales elevan esta cifra hasta los dos millones.