La planta de energía nuclear de San Onofre, ubicada al sur de la costa de California, cerró una de sus unidades después de que un sensor detectó una posible fuga en un tubo generador de vapor.
La supuesta abertura se detectó este lunes alrededor de las 16:30 hora local (23.30 GMT) y una hora después la unidad ya estaba completamente cerrada, informó la compañía eléctrica propietaria Southern California Edison.
La portavoz oficial de la planta, Jennifer Manfre, aseguró que "la potencial fuga no representa ningún peligro inminente para los trabajadores de la planta o para los ciudadanos. Informó que no hubo evacuaciones y que los técnicos evalúan la situación para determinar si la fuga se había producido finalmente.
Esta no es la primera vez que ocurre algo similar en esta instalación, ya que en noviembre pasado se declaró en ella estado de emergencia tras producirse una fuga de amoniaco en un sistema de tratamiento de agua, según detalló entonces la compañía eléctrica propietaria de la planta.
Como medida de precaución, en aquella ocasión la compañía evacuó a los empleados que se encontraban en la zona expuesta, mientras que el resto de los trabajadores de la central continuaron en sus puestos.
Al igual que la central japonesa de Fukushima, la de San Onofre está situada en la línea de costa y cuenta con dos reactores nucleares que tienen capacidad para proveer de energía a 1,4 millones de hogares.