Puede parecer que los conflictos de Irán y Siria con Occidente no tienen nada que ver el uno con el otro. Sin embargo, podrían ser dos eslabones de una misma cadena, porque una agresión contra Damasco obligaría a Teherán a responder.
Ahora Irán ayuda al Gobierno sirio en su lucha contra los opositores armados, según medios israelíes y árabes. Así, la cadena televisiva Al Arabiya reporta que los Guardianes de la Revolución Islámica han asignado a 15.000 soldados para ayudar al presidente Bashar al Assad, que está tratando de resolver el sangriento conflicto interno que dura ya casi un año.
El periódico israelí Haaretz cita las palabras de un miembro del Consejo Nacional de Siria, Kassam Salimani, quien reveló que un comandante de las fuerzas especiales iraníes ha llegado a Siria. Su objetivo es aconsejar a los dirigentes de las fuerzas de seguridad sirias sobre operaciones contra grupos opositores armados.
Recordemos que existe un acuerdo entre Siria e Irán de defensa recíproca, firmado en 2008, que especifica que cuando alguno de estos países sea atacado, el otro está en el deber de intervenir a su favor. ¿Cómo podría Occidente aprovechar esto?
Un triángulo peligroso: EE. UU.–Siria–Irán
El Departamento de Defensa de EE. UU. busca desarrollar una lista completa de las tropas sirias y los riesgos que correría Washington en caso de que decida emprender un nuevo conflicto armado, según medios norteamericanos.
La “ofensiva diplomática y económica concertada” contra las autoridades sirias que están realizando EE. UU. y sus aliados, podría preparar el terreno para “un posible ataque contra el país que a su vez podría ser el primer paso ante un ataque contra Irán”, sostiene el analista político Lajos Szaszdi.
Irán también está sintiendo una fuerte presión internacional por su programa nuclear, a pesar de que, según Teherán, este solo tiene motivaciones civiles. La situación se agrava por las amenazas de un ataque por parte de Israel y EE. UU., que señalan que podrían recurrir a la fuerza porque temen que la República Islámica esté intentando crear armas nucleares.