El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, afirmó que la incapacidad del Gobierno de Estados Unidos para combatir el narcotráfico no deja otra opción a los países de América Latina que legalizar los estupefacientes.
Molina quiere convencer a los presidentes de Centroamérica para aprobar la despenalización de la droga como estrategia para combatir el narcotráfico, según le informó el mandatario guatemalteco a su homólogo salvadoreño, Mauricio Funes, tras una reunión de trabajo para discutir temas de seguridad regional y de combate al narcotráfico. Según manifestó Pérez Molina, de este modo se haría menos rentable el narcotráfico y reduciría la violencia generada por los carteles de la droga.
"Un tema contradictorio"
Anteriormente, el mandatario guatemalteco había anunciado su intención de "buscar consensos" entre la región centroamericana y otros países cercanos como Colombia, México y EE. UU. respecto a la despenalización de las drogas para detener los miles de crímenes relacionados con esas actividades ilícitas. Pérez Molina dijo que aunque el tema "es contradictorio", se lo debe "poner sobre la mesa" para analizarlo y buscar consensos con el resto de los Gobiernos de la región.
Además de reducir los hechos de violencia relacionados con el narcotráfico, la legalización de las drogas también disminuiría la comisión de delitos como el lavado de dinero, el tráfico de armas, el contrabando y la corrupción, explicó el presidente.
"Un paraíso del consumo de la droga"
Por su parte, el presidente de El Salvador afirmó que está en contra de la despenalización de las drogas en Centroamérica. A pesar de que este domingo Funes dijo que no tenía una posición clara sobre la propuesta de Molina, este mismo martes afirmó en la capital de su país, San Salvador, que está en contra, debido a que el istmo se convertiría en un "paraíso del consumo".
"En lo particular yo no estoy de acuerdo con la despenalización ni de la producción, ni del tráfico, ni del consumo de drogas", dijo Funes, porque "crea un problema de índole moral", agregó. "¿En qué vamos a convertir a Centroamérica? En un paraíso del consumo de drogas", señaló.
Resaltó que necesitaba aclarar su posición para "evitar interpretaciones erróneas", luego de que en Guatemala asegurara que su par Pérez Molina "tiene todo el derecho de proponer cuanta iniciativa quiera" y que la misma será considerada con los demás mandatarios de la región, pero que él no la apoya.
De ese modo, se reabrió la discusión sobre la despenalización de las drogas en Centroamérica, porque la iniciativa de Guatemala también será presentada, en fechas aún no precisadas, a los gobiernos de EE.UU., México y Colombia, informó la Presidencia guatemalteca.