El relator especial de la ONU Juan Méndez acusó formalmente a Washington de trato inhumano con el soldado estadounidense Bradley Manning, detenido desde hace más de un año por EE. UU. por la supuesta filtración de cables secretos a WikiLeaks.
En este sentido el activista Lorenzo Tropete opina que "es probable que sea una venganza interna o una represión interna, más que venganza hacia este soldado por parte del sistema norteamericano. Habrá que ver el enfoque que le den puesto que dentro de las cortes militares americanas la traición y la ayuda a los enemigos se puede condenar con pena de muerte, efectivamente", dijo.
Manning trabajó en Irak como analista militar y fue arrestado en agosto de 2010. Además de la filtración de información secreta a WikiLeaks, al joven se le acusa de 21 cargos más. Si es condenado por el tribunal militar que debe juzgarlo, Manning podría afrontar una condena de cadena perpetua.
El relator insiste en que las autoridades estadounidenses violan los derechos humanos en relación del soldado Manning, encarcelándolo aislado durante 23 horas al día. Entre tanto, el Pentágono expresó su satisfacción por las condiciones en la cárcel donde permanece Manning.
Hablando del sistema de cárceles en Estados Unidos, Tropete sostuvo que las cárceles están llenas de gente que sufre abusos sin ni siquiera ser condenados. "Nos damos cuenta de que el sistema de justicia, militar o no militar, de EE. UU. carece de un compromiso mundial hacia las organizaciones para derechos humanos y en este caso tenemos a Guantánamo y muchas cárceles para inmigrantes donde el trato es malo hacia el detenido, y al igual que Manning aún todavía no es ni juzgado, ni culpable", dijo el experto en sus declaraciones a RT.