Diez niños de la ciudad rusa de Bratsk, en Siberia, cayeron en coma y terminaron en cuidados intensivos tras haber sido sometidos a procedimientos médicos. Una sobredosis de anestésicos figura como la posible causa del padecimiento de los pequeños con edades que van de los 8 a los 24 meses.
Los bebés con diferentes diagnósticos de enfermedades infecciosas ingresaron en un centro hospitalario donde estuvieron recuperándose, algunos con síntomas de descomposición y otros con resfríos.
Según sus padres, los pequeños padecieron un brusco empeoramiento tras recibir unos medicamentos inyectados por los médicos que les provocaron fiebre, mareos, vómitos y convulsiones.
"Mi hijo estaba sentado en la cama cuando empezó a sufrir convulsiones. Después empezó a temblar. Lo llevé con la enfermera y le pregunté, ¿qué está pasando con mi niño? Ella me contestó que algo estaba mal. Llamó a la que le había puesto las inyecciones y ella dijo que era un shock y esto pasaría pronto. Y nadie le prestó socorro. Llegó otra mujer y preguntó: mi hija está temblando, ¿qué le está pasando? La cabeza de la niña se echó hacia atrás, se le salió la lengua y sus labios se tornaron azules. Las enfermeras agarraron a nuestros hijos y corrieron hacia la unidad de cuidados intensivos", contó la madre de uno de los niños.
Tratamiento que puede lisiar
En los casos de enfermedades leves suelen usarse antibióticos pero como las inyecciones son muy dolorosas, los medicamentos están diluidos con analgésicos, tales como lidocaína o novocaína.
"Esto pasó durante un corto período de tiempo, durante la administración del medicamento. Los niños se volvieron indolentes, somnolientos y se pusieron a dormir delante de sus madres. Esto alarmó a los padres, porque sus hijos no se recuperaban", dijo Narine Mkrtchan, directora del área que atiende a niños con enfermedades infecciosas.
Ahora los médicos lograron estabilizar a los menores. Actualmente, cinco de los 10 se encuentran en una sala común, fuera de peligro. Los doctores suponen que las enfermeras no respetaron las proporciones durante la preparación de solución anestésica que les aplicaron.
"Empezamos una prueba ante la instrucción. Los jueces instructores investigan el asunto, será realizada una valoración de las acciones del personal médico y tras los resultados será emprendida una decisión procesal", indicó Vladímir Salovárov, asistente principal del jefe del Comité de Investigación de la región de Irkutsk (Siberia).
Un error garrafal que podría haberse cobrado la vida de casi una decena de niños. Pero independientemente de los resultados que determinen las investigaciones, los padres de estos pequeños pacientes tienen planeado pedir un juicio y remitir una queja al Ministerio de la Salud.