El Museo Nacional de Antropología e Historia de México fue el primero en aplicar altas tecnologías al estudio de la Historia. En aquel recinto se estrenó una instalación, aún extraña para el mundo de los museos: una pantalla de alta definición interactiva que proyecta imágenes detalladas de la Piedra del Sol, uno de los monumentos más representativos de la cultura azteca.
Ahora los visitantes del museo, a través de este dispositivo, podrán apreciar todos los elementos de La Piedra del Sol, llamada también “Calendario Azteca”, y conocer su historia, escrita brevemente en varios idiomas. Además, en la pantalla se relatan los traslados que la pieza tuvo, desde su origen, hasta el siglo XX.
"Queremos congregar el desafío de la tecnología a la Historia mediante una pantalla que sea capaz de describir virtualmente la pieza más representativa de este museo", dijo la directora del museo, Diana Magaloni. "Todos admiran la belleza de La Piedra del Sol, pero casi nadie sabe su historia, por eso nos interesa que los niños la empiecen a conocer”, dijo.
Especialistas del Museo trabajaron en el desarrollo de ese proyecto durante ocho meses y la Piedra del Sol fue elegida para realizar las primeras pruebas con esta tecnología de vanguardia. Se planea ampliar su uso y, en un futuro cercano, proyectar otras piezas emblemáticas disponibles del museo.
El Museo Nacional de Antropología —que reúne un extraordinario acervo arqueológico y etnográfico— fue fundado como homenaje a las culturas indígenas que poblaban el territorio mexicano durante la era Precolombina.
El edificio donde se encuentra cuenta con una superficie de casi 80 000 metros cuadrados, recibe a casi 2 millones de visitantes al año y dispone de una riquísima colección de objetos de la época prehispánica, colección considerada como una de las más valiosas del mundo.