Decenas de personas se han reunido este 1 de abril en Moscú en las puertas del Centro Panruso de Exposiciones para protestar contra las manifestaciones. Según los organizadores del evento, un invierno de elecciones -primero parlamentarias, luego presidenciales-, lleno de mítines, marchas, lemas y discursos tanto en contra como a favor del Gobierno electo, cansó mucho a la gente. Opinan que observar este teatro político durante tanto tiempo desembocó en la formación de una protesta 'contra todos'.
La 'protesta contra protestas' ha sido un espacio para que se expresen las víctimas principales de estas actividades políticas, policías y periodistas en primer lugar, quienes en el ejercicio de sus funciones laborales han debido presenciar todo tipo de manifestaciones, sin tomar en cuenta sus propios deseos. En la manifestación se veían hombres vestidos de uniforme policial y a su lado jóvenes con carteles del tipo "Los policías también tienen familias" y "Quiero irme a casa ya".
"Soy periodista y cubrí prácticamente todas las protestas durante los últimos meses y me siento muy cansado. Mi familia casi no me ve, ni siquiera los días de descanso. Viene la hora de expresar mi propia protesta", comenta uno de los participantes en la manifestación.
La primera 'protesta contra protestas' en la historia rusa duró poco más de una hora y consistió en un concierto y la entrega de semillas a los participantes, como una señal del inicio de la temporada de siembra. Según los organizadores, su intención desde el principio era dar al evento un evidente matiz burlesco. Incluso la fecha fue elegida con este propósito: el 1 de abril, día en el que en Rusia se celebra el equivalente al Día de los Santos Inocentes en el mundo hispanohablante.
Sin embargo, ni siquiera este domingo los periodistas pudieron descansar. Simultáneamente a su 'protesta contra protestas', en el centro de la capital rusa se ha producido un 'flashmob', esta vez de la oposición.
Inicialmente, la iniciativa tenía el nombre de 'Plaza Blanca': sus organizadores invitaron a todo el mundo a pasear en la Plaza Roja de Moscú a lo largo de todo el día sin carteles ni lemas, solo con cintas u otros objetos de color blanco pegados a su ropa, ya que el color blanco es el símbolo de la campaña opositora 'Por unas elecciones justas'. Sin embargo, más tarde estos planes se han visto algo modificados: la Plaza Roja fue cerrada para los turistas este domingo y los participantes del 'flashmob' se han reunido en la cercana Plaza Manézhnaya.
Unos 85 participantes del evento fueron arrestados. Según precisa la Policía, las detenciones se deben a que la convocatoria para realizar un mitin que se hizo sin la autorización de la Administración capitalina. Los organizadores del 'flashmob', por su parte, afirmaron que como no se trataba de una manifestación, sino de "un simple paseo por el centro de la ciudad", no sabían que para eso debían pedir un permiso oficial a las autoridades. Todos los detenidos fueron liderados durante la mañana de este lunes.