En busca de compromiso: EE. UU. podría permitir a Irán enriquecer uranio hasta el 5 %
EE. UU. podría permitir a Irán enriquecer uranio a cambio de concesiones. La administración del presidente Obama analiza ceder para que Irán enriquezca uranio hasta el 5% si el gobierno iraní permite a los inspectores internacionales el acceso a sus instalaciones nucleares para un control constante de su programa nuclear y garantiza que no fabricará armas nucleares, reporta el diario Los Angeles Times.
El analista político Adrián Mac Liman cree que esta decisión distensa la situación por el controvertido programa iraní, pero su verdadero significado estará claro dentro de unas semanas.
“Habría que estudiar la propuesta pero de entrada es la política del palo y la zanahoria. Es decir después de una ofensiva naval y algunas amenazas bastante fuertes, sobre todo por parte de los aliados de EE. UU. en la región, como Israel, ahora se pretende bajar un poco el tono. Lo que significa esto lo podremos ver en las próximas semanas. Lo que sí es obvio es que EE. UU. con su nueva postura, así como Israel con las declaraciones mucho más moderadas de sus altos mandos militares y también de algunos políticos, lo que están tratando un poco es de apaciguar todo esto”, dijo.
“Están esperando quizás la próxima reunión del grupo de los cinco más uno con Irán para saber si efectivamente se puede llegar a una solución negociada”, subrayo Mac Liman.
Las autoridades estadounidenses y de otros países concluyeron que Irán no dejará de desarrollar su programa nuclear por lo que es necesario buscar compromisos. Un 5% es el grado de enriquecimiento del uranio para usarlo con fines pacíficos. Para crear un arma nuclear hace falta enriquecer uranio hasta el 90%. En febrero del 2010, se informó que los científicos iraníes lograron enriquecer pequeñas cantidades de uranio a un nivel de hasta el 20%.
Entre tanto, la reciente iniciativa generó las agudas críticas de los republicanos, en particular, del aspirante a la presidencia Mitt Romney.
En los últimos meses Occidente ha intensificado la presión sobre Irán para que abandone su programa nuclear por sospechar que este tiene fines militares. EE. UU., Israel y sus aliados europeos han impuesto una serie de sanciones contra la República Islámica, entre ellas el embargo al crudo iraní.
Irán, por su parte, rechaza toda acusación sobre el desarrollo de armas nucleares y afirma que su programa tiene fines puramente pacíficos.
A mediados de abril en Estambul se celebró la primera ronda de conversaciones sobre el programa nuclear iraní. A la reunión asistieron representantes del Sexteto de negociadores internacionales (EE. UU., Rusia, China, Alemania, Francia y Reino Unido) y altos funcionarios iraníes. Las negociaciones respecto al tema transcurrieron en una atmosfera constructiva. La siguiente ronda está programada para el 23 de mayo y tendrá lugar en Bagdad, Irak.
Asimismo el analista opina que “tanto para Israel como para EE. UU. un ataque militar contra Irán podía tener consecuencias catastróficas no sólo para la región, sino para todo el mundo”.