Japón apagará este sábado su último reactor nuclear operativo en la planta de Tomari, en la isla de Hokkaido, al norte del país y así quedará completamente sin energía atómica por primera vez en 40 años. La operadora de la central realizará la parada a las 23:00 hora local (14.00 GMT), pero el cierre frío tendrá lugar el lunes próximo.
Desde que el terremoto y tsunami que se produjo el 11 de marzo del 2011 en el noreste del país y causó la peor crisis nuclear en la central de Fukushima, Japón ha empezado la parada de sus reactores para revisarlos, hacer pruebas de resistencia y determinar la seguridad. Todas las centrales permanecerán paralizadas hasta que las nuevas medidas de protección sean impuestas. Después los reactores volverán a funcionar.
Antes de la catástrofe la energía nuclear generaba de entre el 25% y 30% de la electricidad del país. Para satisfacer la demanda el Gobierno ha intensificado el uso de las plantas térmicas, lo que resultó en un aumento de los gastos en la importación de combustibles fósiles. Estas medidas forzadas han llevado al mayor déficit de la balanza comercial del país en los últimos 33 años.