Obama rechaza la Segunda Gran Depresión y promete crear más empleos
A pesar del crecimiento económico de Estados Unidos, registrado en los últimos meses, aún existe el serio problema del desempleo en el país, declaró el presidente estadounidense, Barack Obama, durante su discurso tradicional a los ciudadanos transmitido por Internet y televisión. El líder norteamericano informó que va a tomar medidas para cambiar la situación del mercado laboral.
El colapso potencial del sistema financiero y la Segunda Gran Depresión ya no amenazan al Estado, declaró Obama, garantizando a los estadounidenses que la economía del país comienza a restablecerse. "Gracias a la Ley para la Recuperación y otras medidas, que han sido tomadas por la Administración estadounidense, la perspectiva de colapso financiero o la segunda gran depresión no nos amenazan más".
Sin embargo, el crecimiento económico registrado últimamente no ha provocado todavía la rebaja del desempleo. Por eso va a proponer unas acciones que permitan crear nuevos empleos en el país, señaló el líder estadounidense. "Dentro de poco tiempo voy a ofrecer propuestas complementarias para activar la creación de nuevos empleos hasta que salgamos de la crisis financiera".
Obama planea anunciar sus proposiciones durante su intervención en Washington el 8 de diciembre. Según unos representantes de la Casa Blanca, su nuevo plan incluirá varias iniciativas para apoyar a las empresas y ayudar a los parados.
El 3 de diciembre Barack Obama se reunió con expertos financieros para discutir el problema del desempleo y las vías de su reducción. En la Conferencia sobre Creación de Empleos participaron expertos en la esfera laboral -empresarios, legisladores, banqueros y financieros-. Durante el congreso el líder norteamericano invitó a los comerciales a invertir más en la economía nacional. "El desempleo crónico en Estados Unidos no es sólo una formalidad, sino una lucha que preocupa a la gente de todo el país. Por eso los comerciales estadounidenses deben invertir más en la economía nacional".
El desempleo es el principal dolor de cabeza para el Gobierno estadounidense. El grupo de economistas de Obama confiesa que no puede retener el aumento del desempleo a pesar de la mejora de los demás índices económicos.
Según los datos oficiales, el desempleo en Estados Unidos trepó a su nivel más alto en los últimos 26 años. El índice de desocupación avanzó al 10,2% en octubre por la eliminación de 190.000 empleos. En total, actualmente en el país hay casi 16 millones de personas afectadas. Los expertos creen que las compañías no tienen prisa para contratar a la gente, porque no están seguros de su futuro. Muchos analistas consideran que el Estado puede sufrir una nueva recesión en breve.