Una lesbiana, nombrada obispo en EE.UU.
El jefe de la Iglesia de Inglaterra, el Arzobispo de Canterbury Rowan Williams, ha expresado en un comunicado oficial su preocupación por la elección en EE.UU, por segunda vez en los últimos dos años, de un obispo con orientación homosexual. La reverenda Mary Glasspool, que se declara abiertamente lesbiana, fue elegida obispo de la diócesis de Los Angeles de la Iglesia Episcopal de Estados Unidos, que forma parte de la Comunión Anglicana.
“La elección de Mary Glasspool como obispo de la diócesis de Los Angeles plantea una seria cuestión, no sólo acerca de la Iglesia Episcopal y su lugar en la Iglesia de Inglaterra, sino de la iglesia en general”, afirmó el Arzobispo de Canterbury en el comunicado publicado el domingo en su página oficial de Internet.
Williams agregó que el proceso de selección todavía no está completo y que Glasspool podrá asumir el cargo sólo tras la aprobación de su candidatura por la mayoría de los obispos norteamericanos y las comisiones episcopales. “La decisión tendrá unas implicaciones muy importantes”, enfatizó.
En los últimos años la Iglesia Episcopal de EE.UU. atraviesa una escisión grave después de que en 2003 se eligiera como obispo de New Hampshire a un homosexual, Gene Robinson. Entonces varias diócesis y parroquias conservadoras se distanciaron de la Inglesia Episcopal, pero Rowan Williams no ha reconocido su desvinculación a pesar de la presión que ha recibido para hacerlo.
En 2007 la conferencia de Iglesias Anglicanas amenazó a la Iglesia Episcopal con cortar lazos si no renunciaba al ordenamiento de sacerdotes homosexuales. El mismo año los jerarcas de la Iglesia Episcopal de EE.UU. decideron no nombrar a obispos homosexuales, así como no bendecir los matrimonios gais para permanecer en la Comunión Anglicana, pero el verano pasado la moratoria fue abrogada.
“Los obispos reconocieron colectivamente la necesidad de estas restricciones para guardar nuestros enlaces de simpatía mutua”, apuntó el máximo jerarca de la Inglesia de Inglaterra. Pero ahora que Glasspool, que tiene 55 años y convive desde 1988 con su novia Becki Sander, puede convertirse en el segundo obispo gay, el escándalo amenaza con desencadenarse de nuevo.