El movimiento 15-M de los indignados españoles continuó en Madrid con su programa de actividades, un día después de conmemorar a pie de calle el primer aniversario del movimiento en la Puerta del Sol, de donde fueron desalojados esta madrugada.
Vuelven los eslóganes, los cánticos y las asambleas para exigir un cambio político y una salida a la crisis diferente a la austeridad de las reformas. Varios activistas asistieron a una breve obra de teatro protagonizada por sus compañeros, en la que criticaron "la privatización" de la sanidad.
En otros puntos del centro madrileño también se han organizado actividades, como un taller sobre el aborto o un "tendedero de mentiras sociales", así como el "tribunal ciudadano de justicia", que, según ha señalado uno de los asistentes, trata de que la justicia española reconozca que los bancos "han engañado" a los ciudadanos.
El sábado la voz del movimiento 15-M volvió a hacerse oír no sólo en decenas de ciudades españoles, sino también en otros países europeos, donde muchos ciudadanos unen su voz para denunciar que no son "mercancía en manos de políticos y banqueros".
Pese a haber sido desalojados y detenidos en algunos casos, los indignados mantienen vivo su espíritu y no piensan cesar sus actividades hasta el 15 de mayo, fecha cuando se formó su hermandad anti-capitalista.