La ley argentina para la expropiar el 51 % de las acciones de la petrolera YPF se promulgó a principios de este mes, tras ser aprobada en el Congreso.
El conflicto Repsol-YPF se desató después de que la presidenta Cristina Fernández de Kirchner acusara a la empresa privada de origen español de una caída en la producción por falta de inversión.
Según las encuestas, la renacionalización de YPF y la restauración de la independencia energética tienen el visto bueno de más de dos tercios de los argentinos, quienes opinan que la privatización de dicha compañía en los años 90 originó una grave crisis económica en el país en el periodo 2001-2002.