Según informó su vocero, Thomas Traumann, la mandataria donará todo el dinero a la ONG ‘Tortura Nunca Más’, creada en Río de Janeiro en 1985 y que se dedica a luchar por la investigación sobre las circunstancias y las responsabilidades de los asesinatos de presos políticos.
Junto a la presidenta, el Gobierno de Rio pedirá disculpas y otorgará más indemnizaciones por el mismo valor a otros 119 ex presos políticos en el marco de una ceremonia que se llevará a cabo el 4 de junio.
Además de Rio, Rousseff también pidió indemnizaciones en Sao Paulo y Minas Gerais, estados donde fue interrogada, procesada, juzgada y condenada.
La mandataria brasileña, de 64 años, ex guerrillera y economista, empezó su militancia política a los 16 años e integró dos organizaciones armadas clandestinas de oposición a la dictadura. En 1970 Rousseff fue arrestada, tras lo cual permaneció presa durante casi tres años y fue torturada para que revelara nombres de otros militantes.
Según precisa el Gobierno de Rio, desde 2001, cuando se creó la ley estatal de reparación, 1.113 personas reclamaron indemnizaciones y ya fueron abonadas 650.