“Este terror tiene detrás a los principales Estados del mundo, que destinan enormes recursos para esto”, afirmó Riyad Mohammad Haddad. “Tenemos que responder a estas provocaciones”, agregó el diplomático.
Resaltó que los fines de los ataques terroristas son justificar la intervención extranjera y la creación de “zonas protegidas por fuerzas internacionales”.
El embajador sirio señaló que su gobierno ha prometido cumplir el plan de Kofi Annan y lo está cumpliendo, ha liberado miles de presos de las cárceles y permitido a centenares de medios internacionales de información trabajar en el país.
“Pero vemos que varios países occidentales, incluida Francia, así como algunos Estados árabes hacen todo lo posible para socavar el plan de paz”, dijo el embajador.
Los acusó de seguir armando a varios grupos terroristas que operan Siria matando tanto a soldados como a civiles y que secuestran a niños y mujeres exigiendo después rescates por ellos.
Mientras tanto, una fuerte explosión sacudió las calles de Damasco este jueves, dejando al menos 14 personas heridas y cuantiosos daños materiales.
El incidente se produjo por la detonación de un coche bomba conducido por un suicida.
Según la ONU, los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y las de la oposición desde marzo del 2011 se han traducido en más de 12.000 muertos.