"Irán y Bolivia están en contra de cualquier colonialismo y de la avaricia de ciertos estados que están en contra de nuestra libertad'', dijo Ahmadinejad al finalizar su visita de seis horas a Bolivia.
Por su parte, el líder boliviano denunció "la agresión permanente a Usted, a su gobierno y al pueblo de Irán" y brindó su apoyo a Teherán. "Quiero decirle que no está solo porque le acompañamos en su lucha antiimperialista'', le dijo Morales refiriéndose a duras sanciones impuestas por EE. UU. a Irán por su polémico programa nuclear.
Además, Ahmadineyad aseguró que durante su entrevista con Morales se tomaron "buenas decisiones" sobre asuntos comerciales, políticos, científicos y tecnológicos, conducentes a "elevar" el nivel de las relaciones, aunque no precisó de qué tipo de acuerdos se trata.
Ambos líderes suscribieron asimismo un memorándum de entendimiento para fortalecer la lucha antidroga y la reducción de cultivos excedentes. El objetivo de este documento es el fortalecimiento y desarrollo de la cooperación bilateral en materia de lucha contra la producción, distribución, tráfico y abuso de drogas y estupefacientes.
Bolivia y Teherán tienen un contacto tanto económico como político y militar muy directo desde hace años, acentúa el analista político Eduardo Martínez. Según él, el principal motivo que acerca a ambos países es la oposición a las grandes potenciales mundiales.
Esta ha sido la tercera visita que Ahmadineyad hace a Bolivia. En 2007 y 2009 llegó a La Paz para fortalecer sus relaciones de cooperación estratégica, económica, militar y de seguridad.
Tras su visita a Bolivia, Ahmadineyad viajará a Venezuela, donde se reunirá con su homólogo Hugo Chávez. Después partirá hacia Brasil para participar en la Cumbre sobre Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, conocida como Cumbre Río+20.