El 18 de diciembre de 1936 México aceptó a León Trotski
A finales de 1936 León Trotski, el revolucionario ruso expulsado del país hacía 9 años, fue admitido en México en calidad de refugiado. El presidente mexicano de entonces, Lázaro Cárdenas, concedío la prerrogativa de asilio político a Trotski el 18 de diciembre de 1936, según informa EFE (otras fuentes mencionan el 5 o el 6 de diciembre de 1936).
Tras su exilio del país soviético en 1929, se había refugiado primero en Turquía, luego en Francia y Dinamarca y por último en Noruega, los estados que, al no querer perjudicar las relaciones con Rusia a causa de la admisión de un proscrito político, iban haciendo todo lo posible para deshacerse de él.
En Noruega le confiscaron todas sus obras y le retuvieron en su domicilio, e incluso le amenazaron con entregarle a las autoridades soviéticas. En cuanto el pasaporte del refugiado fue expedido, León junto con su esposa Natalia y unas personas acompañantes embarcaron en un buque tanque para llegar a México el 9 de enero de 1937 (según otras fuentes, el 12 de enero de 1937).
Consiguió el asilo gracias a la actitud política del México de aquel entonces. El país demostraba su desacuerdo con el régimen franquista en España, instaurado mediante la fuerza, reconoció al Gobierno republicano en el exilio y aceptaba a los emigrantes y refugiados, siguiendo el principio de no intervención en la política interna de otros países y reconociendo el derecho de asilo.
En este contexto los que simpatizaban con las ideas del revolucionario rojo, organizaron una serie de acciones con el fin de atraer la atención a la necesidad de concederle el refugio político. Fue el muralista mexicano Diego Rivera, un apacionado trotskista, y el fundador del Partido Comunista Mexicano, Octavio Fernández Vilchis, quienes gestionaron el asunto con el presidente del país.
La perspectiva de acoger al pasionario bolchevique, el enemigo número uno del Gobierno de la Unión Soviética, causó fuertes críticas en la opinón pública mundial y en el propio Estado. Pero finalmente él junto con su esposa llegaron al puerto de Tampico. El presidente Cárdenas giró órdenes para que el tren presidencial fuera a recogerlos y a trasladarlos a la capital azteca.
Recibidos por la esposa de Diego Rivera, Frida Kahlo, los refugiados se instalaron en la delegación de Coyoacan, en la llamada Casa Azul, la casa natal de Frida, que les concedió la pareja artística. Fue allí donde vivieron dos años hasta que la diferencia en ciertas visiones políticas causó la ruptura de la amistad entre las dos personalidades. Entonces cambió la residencia para una casa cercana, donde sufrió dos atentados por mandato de Stalin, el último de los cuales, el 20 de agosto de 1940, le costó la vida.
León Trotsky (su nombre real fue Lev Davídovich Bronstein), nacido en una familia judía en Ucrania el 7 noviembre de 1879, fue revolucionario soviético, teórico del marxismo, el principal ideólogo de su rama radical, el trotskismo. Uno de los principales protagonistas de la revolución bolchevique en Rusia en el año 1917, participó en la creación del Ejército Rojo, así como en la fundación de la Tercera Internacional Comunista (Comintern). Compañero de lucha de Vladímir Lenin, después de su fallecimiento en 1924, se enfrentó política e ideológicamente a Iósif Stalin, liderando la Oposición de Izquierda. Esto causó su exilio en 1929, en la cual creó la trotskista Cuarta Internacional, publicó los estudios de la historia del movimiento revolucionario en Rusia, artículos críticos y memorias hasta su asesinato.