"Según los datos de un alto cargo estadounidense, los oficiales de la CIA se encuentran en el sur de Turquía desde hace algunas semanas. Una de sus tareas es asegurarse que las armas que se suministran a los rebeldes sirios no resulten en manos de Al Qaeda u otros grupos terroristas", en palabras del funcionario que recoge la publicación.
El periódico subraya que el mismo EE. UU. no suministra armas a los adversarios de Bashar al Assad. No obstante, las fuentes del New York Times aseguran que los empleados de la CIA controlan y ayudan al reparto de las armas y munición de guerra, comprados con el dinero de Turquía, Arabia Saudí y Qatar, a los opositores sirios.
Estas armas entran en Siria en general a través de la frontera turca. Para esto se usa una red secreta de mediadores. La fuente afirma que a los rebeldes sirios se les suministran fusiles, lanzagranadas, municiones de guerra y armas que se aplican contra tanques. "En la Administración de Obama precisaron que no suministran armas a los rebeldes sirios, pero reconocieron que algunos vecinos de Siria lo hacen", dice el periódico.
EE. UU. y Reino Unido están dispuestos ofrecer a Bashar al Assad, clemencia y garantizar un paso seguro, para impulsar una conferencia para la transición política en el país árabe. La información fue publicada por el periódico "The Guardian" y cita a fuentes diplomáticas de Gran Bretaña. Según el rotativo, esta decisión viene tras el encuentro de Barack Obama y David Cameron con Vladimir Putin en el marco de la Cumbre del G-20, que tuvo lugar en México. Sin embargo en su discurso en la misma conferencia el presidente ruso destacó que el destino del país debe ser determinado por su población.
El coordinador del boletín "Armas contra las guerras", Alfredo Embid, opina que los gobiernos que suministran armamento a los rebeldes y provocan el aumento del conflicto, no tienen ningún derecho a decidir sobre la clemencia para los políticos sirios. También denunció a RT que EE. UU. usa la táctica de personalizar conflicto en Assad.