Castro aludió así a la situación política de Paraguay a raíz del juicio político y destitución de Fernando Lugo de la Presidencia, informaron medios oficiales cubanos.
“Los golpes de Estado en el continente han vuelto, pero disfrazados”, afirmó el gobernante tras añadir que los últimos acontecimientos no le sorprenden.
En ese sentido rememoró el golpe de Estado en Chile en 1973 que “no fue planificado, ni organizado por Augusto Pinochet”, y subrayó el hecho de que “aún no se han desclasificado los documentos que mostrarían el papel jugado por Estados Unidos a través del secretario de Estado, Henry Kissinger”.
También apuntó que hace dos años él mismo auguró, en una conversación con su hermano y antecesor, Fidel Castro, que “el día en que los intereses de EE. UU. se vieran amenazados en este continente volverían los golpes de Estado, y han vuelto, pero disfrazados”.
“Con el presidente venezolano, Hugo Chávez, se desesperaron y apelaron al golpe militar, estuvo destituido, pero a él lo salvó el pueblo y fracasaron”, recalcó.
El pasado sábado a través de una declaración oficial, el Gobierno de Cuba condenó “enérgicamente el golpe de Estado parlamentario" en Paraguay contra Fernando Lugo y aseguró que la isla no reconocerá autoridad alguna “que no emane del sufragio legítimo y el ejercicio de la soberanía por parte del pueblo paraguayo”.