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La crisis arrastra a los informáticos españoles: se manifestarán el 30 de junio
Los trabajadores del sector informático de España han convocado una manifestación para el 30 de junio que se celebrará en Madrid, Barcelona y Zaragoza.
Los informáticos saldrán a las calles para protestar contra la ola de despidos que sacude al sector y la creciente precariedad laboral en el mismo.
"Ahora somos otro sector más, explotado en nombre del capitalismo y de la producción barata en un país donde no se valora el conocimiento, la investigación y el desarrollo, la calidad del producto realizado, sino el hacer caja, cuanto antes mejor, y después de machacar a los trabajadores, volar a otro objetivo cuando ya no quede nada que rascar", reza el manifiesto de los organizadores de la movilización.
Los empleados de las empresas multinacionales y nacionales del sector señalan que las recientes reformas laborales aprobadas por el Gobierno español han suministrado a las compañías múltiples herramientas para aumentar beneficios empresariales disminuyendo costos laborales.
“Mediante la imposición de horas extra, pocas veces voluntarias y raramente pagadas, se ahorran miles de puestos de trabajo que podrían estar ocupados por una fracción de estos cinco millones de compañeros, vecinos y amigos que están en la calle engordando las listas del paro”, señala el manifiesto de los organizadores de la protesta.
Asimismo los informáticos hacen hincapié en las condiciones laborales precarias en las que se ven obligados a trabajar los especialistas jóvenes recién graduados de las universidades. Lo que les espera son los contratos por obra “en clarísimo fraude de ley”, cualificaciones profesionales inferiores a los trabajos que realizarán “para así ahorrar aún más en los salarios y un largo etcétera de triquiñuelas”.
España, donde el nivel de desempleo es uno de los más altos de Europa, sufre una profunda crisis que le ha obligado a solicitar la ayuda financiera de la UE para sanear a su banca.
"Ahora somos otro sector más, explotado en nombre del capitalismo y de la producción barata en un país donde no se valora el conocimiento, la investigación y el desarrollo, la calidad del producto realizado, sino el hacer caja, cuanto antes mejor, y después de machacar a los trabajadores, volar a otro objetivo cuando ya no quede nada que rascar", reza el manifiesto de los organizadores de la movilización.
Los empleados de las empresas multinacionales y nacionales del sector señalan que las recientes reformas laborales aprobadas por el Gobierno español han suministrado a las compañías múltiples herramientas para aumentar beneficios empresariales disminuyendo costos laborales.
“Mediante la imposición de horas extra, pocas veces voluntarias y raramente pagadas, se ahorran miles de puestos de trabajo que podrían estar ocupados por una fracción de estos cinco millones de compañeros, vecinos y amigos que están en la calle engordando las listas del paro”, señala el manifiesto de los organizadores de la protesta.
Asimismo los informáticos hacen hincapié en las condiciones laborales precarias en las que se ven obligados a trabajar los especialistas jóvenes recién graduados de las universidades. Lo que les espera son los contratos por obra “en clarísimo fraude de ley”, cualificaciones profesionales inferiores a los trabajos que realizarán “para así ahorrar aún más en los salarios y un largo etcétera de triquiñuelas”.
España, donde el nivel de desempleo es uno de los más altos de Europa, sufre una profunda crisis que le ha obligado a solicitar la ayuda financiera de la UE para sanear a su banca.
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