El epicentro del sismo, que ocurrió en la provincia de Xinjiang
estuvo muy cerca de la superficie, a solo 9,8 kilómetros de profundidad.
Más de una decena de personas resultaron heridas, una de ellas se encuentra en estado grave, según la agencia de noticias Xinhua.
Algunas poblaciones se quedaron sin abastecimiento eléctrico. También se registraron aludes de piedras en carreteras.
Temblores se sintieron a 200 kilómetros al oeste del epicentro, en la capital provincial de Urumqi.
El Centro de Redes Sismológicas de China cuantificó el terremoto en 6,6 grados.
El oeste del país es una zona de alta actividad sísmica, en virtud de la fricción de las placas tectónicas india y asiática. Aun así la mayoría de los terremotos no causan víctimas al producirse en lugares desérticos o poco poblados.