Chávez: en Copenhague comenzó la batalla para la salvación del planeta
El presidente venezolano, Hugo Chávez, en sus acostumbradas 'Líneas de Chávez' indica que la Cumbre Climática en Copenhague fue el comienzo de la batalla para la salvación del planeta.
Tras su largo y, como siempre, emocional discurso en la Conferencia en la capital danesa, Chávez decidió volver al tema del clima en sus tradicionales 'Líneas'. El mandatario dedicó las páginas a una sentida reflexión sobre el papel de todos los países en la que calificó como la “cita mundial más importante en los últimos doscientos años”. Chávez señaló que la lucha de Copenhague ya se había iniciado en las calles de la capital danesa a través de las manifestaciones de los jóvenes de todo el mundo.
Tratando su tema preferido, Chávez una vez más subrayó el papel del socialismo en la política mundial. “La única alternativa posible y viable es el socialismo. Lo dije en cada una de mis intervenciones ante todos los representantes del mundo congregados en Copenhague”, escribe el mandatario. Según Chávez, es el único camino posible “si queremos detener esta carrera desalmada y envilecida que sólo nos promete la aniquilación total”.
Además, el mandatario ironizó al contraponer los criterios de los “civilizados” como los triunfadores de una civilización mercantil y utilitaria, y a los “bárbaros” empeñados en creer que cambiando radicalmente de lógica se puede maximizar el bienestar humano, minimizando los impactos ambientales. Según el mandatario, los “civilizados” no toman las medidas que deben tomar, porque “eso les obligaría a cambiar radicalmente su voraz modelo de vida, marcado por el confort egoísta y eso no habita en sus fríos corazones, que sólo palpitan al ritmo del dinero”.
En conclusión, Chávez señaló que la cita de Copenhague sirvió para resolver “el enigma de los dos Obama”, pues dice que con su intervención en la Cumbre “quedó confirmado en su condición de jefe del imperio y Premio Nóbel de la Guerra", al liderar un acuerdo que viola el Convenio Marco de la ONU y el Protocolo de Kioto, los cuales debían regir las discusiones del encuentro.