“Nos enteramos de que el avión pertenecía a Turquía solo después del derribo. Digo al 100% 'ojalá no lo hubiéramos hecho. Pero hay que entender que estamos en guerra y que cada avión ni identificado que viola el espacio aéreo sirio es calificado como enemistoso”, dijo Assad.
"Este avión fue derribado por una pequeña batería antiaérea, estos sistemas no son capaces de alcanzar objetivos a más de 2,5 kilómetros. Este avión volaba muy bajo y fue derribado cuando se acercaba a la costa siria”, dijo el presidente sirio, que precisó que este truco era usado ampliamente por aviones israelíes para pasar burlar los radares, una de las razones por las qué fue derribado.
“Para nosotros el pueblo turco es un pueblo hermano. La noticia del derribo del avión no podía alegrarme. Yo me habría alegrado si se hubiera tratado de un avión israelí”. Assad agregó que quiere creer que el avión turco violó el espacio aéreo por error.
El derribo de la nave provocó tensiones entre los dos países. La semana pasada, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, condenó la acción de Siria y calificó al país vecino de "amenaza clara y presente". Turquía reforzó las zonas fronterizas con lanzacohetes y cañones antiaéreos. Más tarde envió seis aviones de combate F-16 a una base en el sureste del país tras detectar helicópteros sirios cerca de la provincia de Mardin. Los militares turcos informaron de la presencia de helicópteros sirios a 6,5 kilómetros de la frontera turca el uno y dos de julio.
"No vamos a permitir que [el derribo] lleve a un conflicto abierto entre los dos países", declaró Bashar Assad.
El veintidós de junio pasado, Siria derribó un avión turco de reconocimiento F-4 en la zona fronteriza. Según Damasco, la aeronave fue atacada al entrar a su espacio aéreo, mientras Turquía insiste en que fue atacada en aguas internacionales.
Rusia declaró que dispone de información que podría confirmar la versión de que el avión turco F-4 sí había violado el espacio aéreo sirio.