De tal modo, para la nueva revisión se abrirán los paquetes de 78.012 centros de votación (en el país hay un total de 143.132). En cuanto a las elecciones de diputados, se revisará el 60,3% de los sufragios y en los comicios para senador, el 61,3%.
"Se trata del ejercicio de apertura, transparencia y publicidad más grande en la historia electoral de México", según el secretario ejecutivo del IFE, Edmundo Jacobo Molina. “El Instituto Federal Electoral respalda el recuento voto por voto y casilla por casilla cuando haya fundamento legal para ello. El recuento que se realiza con apego a la ley contribuye a la transparencia de la elección y a la vida democrática”, acentúa, por su parte, el presidente del Instituto, Leonardo Valdés.
“No nos oponemos [al recuento], solo pedimos que se aplique la ley. Estamos tranquilos porque sabemos que Peña Nieto ganó la elección. Si se cuentan de nuevo, Peña Nieto volverá a ganar”, asegura Luis Videgaray, coordinador de la campaña electoral del candidato ganador, el priista Enrique Peña Nieto.
El candidato de izquierda Manuel López Obrador perdió la carrera presidencial con una brecha del 6,5%. Una vez anunciados los resultados, entregó una lista de errores e inconsistencias cometidas en 113.855 casillas electorales del país y solicitó el recuento total.
"Si se llegaran a corroborar estas infracciones, esto empañaría el proceso democrático en México y de alguna manera le echaría un manto de incertidumbre a la democracia en América Latina, indudablemente esto no le haría bien a la región", comentó a RT el analista político Eduardo Berezán.
A pesar de que el IFE se limitó a satisfacer esta petición solo parcialmente, el organismo comunicó que deja la decisión de volver a contar todos los sufragios en manos de los consejos locales.