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La izquierda mexicana seguirá impugnando los resultados de las presidenciales
El recuento de votos en México confirmó el triunfo de Enrique Peña Nieto en las elecciones presidenciales del pasado 1 de julio. Sin embargo, al conocer la noticia la izquierda, que perdió con una brecha del 6,62%, reiteró que los resultados están envueltos en dudas por la posibilidad de que se hayan usado recursos millonarios para lograrlos.
El líder izquierdista Manuel López Obrador, bajo cuya solicitud el Instituto Federal Electoral (IFE) de México volvió a contar los sufragios, confirmó su intención de aportar pruebas para demostrar que la “elección la compraron los que no quieren el cambio en el país” y seguir impugnando los resultados. “Tenemos la razón y va a quedar completamente demostrado. Hay que esperar, se les hizo fácil comprar votos, se les hizo fácil utilizar a medios de comunicación para imponer a Peña Nieto, pero no basta con decir nos equivocamos”, insistió.
Peña Nieto, por su parte, comentó que esas acusaciones, que vienen "de adversarios que han perdido, deben ser probadas en el Tribunal Electoral, que actuará en consecuencia”. Llamó a quienes buscan "desacreditar" los comicios a que presenten pruebas.
Admitió que evidentemente han podido tener lugar algunas irregularidades aisladas, pero acentuó que los comicios 2012 han sido los más vigilados en la historia de México “con tres millones de ciudadanos y representantes de partidos que han asegurado el control de más de 143.000 casillas”. Recordó, además, que los observadores internacionales en sus informes habían destacado los mecanismos de seguridad y de control en el proceso electoral.
“Los líderes de la izquierda ganaron muchísimo terreno en esta elección. Llegaron a estar en el segundo lugar y van a tener una buena representación en el Congreso. Lo que están haciendo ahora es parte del discurso político que tienen que hacer para solidificar su base opositora fuerte. No ganaron y entonces tienen que amarrar los cordones de su oposición”, comentó a RT Octavio Pescador, coordinador del Instituto Latinoamericano de la Universidad de California, Los Ángeles (EE.UU.).
Peña Nieto, por su parte, comentó que esas acusaciones, que vienen "de adversarios que han perdido, deben ser probadas en el Tribunal Electoral, que actuará en consecuencia”. Llamó a quienes buscan "desacreditar" los comicios a que presenten pruebas.
Admitió que evidentemente han podido tener lugar algunas irregularidades aisladas, pero acentuó que los comicios 2012 han sido los más vigilados en la historia de México “con tres millones de ciudadanos y representantes de partidos que han asegurado el control de más de 143.000 casillas”. Recordó, además, que los observadores internacionales en sus informes habían destacado los mecanismos de seguridad y de control en el proceso electoral.
“Los líderes de la izquierda ganaron muchísimo terreno en esta elección. Llegaron a estar en el segundo lugar y van a tener una buena representación en el Congreso. Lo que están haciendo ahora es parte del discurso político que tienen que hacer para solidificar su base opositora fuerte. No ganaron y entonces tienen que amarrar los cordones de su oposición”, comentó a RT Octavio Pescador, coordinador del Instituto Latinoamericano de la Universidad de California, Los Ángeles (EE.UU.).
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