La protesta en Tel Aviv pudo haber acabado en tragedia cuando uno de los manifestantes, un hombre de unos 40 años, se empapó de líquido inflamable y se prendió fuego.
Afortunadamente, varios participantes lograron apagar las llamas antes de que llegase la ambulancia y trasladase al hombre a un hospital, donde tuvo que ser atendido de las graves quemaduras que se había provocado.
El hombre repartió varias copias de una carta que leyó antes de quemarse a lo bonzo
"El Estado de Israel me robó y me dejó sin nada", se podía leer en la carta, según una publicación del diario Haaretz.
Las protestas conmemoraban el inicio de las manifestaciones celebradas el año pasado. En julio de 2011, diez activistas instalaron tiendas de campaña como señal de protesta por las injusticias sociales. El acto provocó un movimiento de protesta que se extendió rápidamente por todo el país y que alcanzó su punto álgido en septiembre, cuando casi medio millón de personas, un 10% de la población del país, salieron a las calles en una sola noche.
Aunque las manifestaciones se redujeron poco después de que el Gobierno de Netanyahu estableciera un comité cuya misión era ofrecer soluciones a una amplia gama de problemas sociales, el líder de la protesta, Dafni Leef, señaló este sábado que poco ha cambiado desde entonces.
Paralelamente, otras acciones tuvieron lugar en el Estado hebreo durante la noche del sábado. Entre otras, la denominada 'Marcha del Millón de Hombres' en Tel Aviv y otra en la ciudad de Haifa donde unos 500 judíos y árabes exigieron al Gobierno israelí más justicia social y una reducción del gasto militar.