La secretaria general de la CSI, Sharan Burrow, explicó que un estallido se vuelve probable "cuando una nación pierde la esperanza y su fe en las instituciones democráticas vacila”.
Burrow, quien se encuentra en Atenas para presentar los resultados de un estudio sobre la situación de los empleados en Europa, dijo que se “encontró gente asustada, gente que no quiere tener hijos porque no sabe cómo criarlos”.
Además, la sindicalista británica aseguró que los expertos del Fondo Monetario Internacional (FMI), no son conscientes del peligro que existe en Grecia, ya que “solo piensan en cifras”.
“Dado que el 50% de los jóvenes en Grecia está sin empleo y que el 65% de la población está al borde de la pobreza, el FMI y la Unión Europea deben pensar de nuevo sobre la política que aconsejaron”, señaló la secretaria general de la Confederación Sindical Internacional.
De acuerdo con el estudio presentado por la CSI, los ingresos de un 91% de los griegos se han visto reducidos desde el comienzo de la crisis. En ese contexto, pidió el restablecimiento del salario mínimo y que las pensiones recuperen sus niveles anteriores para que “la gente pueda vivir con dignidad”.