Además, Hammer no negó el hecho de que el foco de la política de EE.UU. respecto al conflicto sirio esté puesto en el "apoyo a la oposición", aunque precisó que su país no le está suministrando armas.
Es más, el diplomático subrayó que la intención de Washington es crear “condiciones que conduzcan a un rápido colapso” del gobierno de Al Assad que "permitan una transición política” oportuna para EE.UU. Para resolver este problema, precisó, la Casa Blanca tiene la intención de recurrir a un endurecimiento de las sanciones económicas contra Damasco.
Irán ofrece su apoyo a Siria
La República Islámica, a su vez, prometió que su apoyo al régimen sirio se mantendrá "inmutable", con su "experiencia y capacidades". "Teniendo en cuenta que los poderes se han unido para dañar a la nación siria, la postura de Irán hacia el país no puede cambiar: siempre estaremos junto a nuestros hermanos sirios", proclamó el primer vicepresidente de Irán, Mohammad Reza Rahimi.El secretario del Consejo Nacional de Seguridad de Irán, Saeed Jalili, invocó por su parte las relaciones "estratégicas" entre la República Islámica y Siria, subrayando que Teherán está dispuesto a apoyar Damasco "más que nunca, para contrarrestar la presión extranjera".