La columna de Keller titulada, ‘WikiLeaks, A Post Postcript’, comenzó a circular en redes sociales con la URL www.opinion-nytimes.com, que no corresponde a ninguna de las secciones del diario, pero nadie advirtió el detalle.
Poco después de su publicación, el propio Bill Keller aclaró a través de su cuenta oficial de Twitter que el artículo, supuestamente publicado de su nombre, representaba un ‘fake’.
“Hay un falso editorial circulando con mi nombre acerca de WikiLeaks. Pongo énfasis en que es falso, no es mío”, afirmó el periodista.
Nick Bilton, autor principal del blog de tecnología del periódico, tuvo que borrar incluso uno de sus 'tuits', porque reproducía el editorial ficticio.
Más tarde, el propio WikiLeaks a través de su cuenta admitió la autoridad del ‘fake’: "Sí. Lo Admitimos. WikiLeaks (Assange y co.) y nuestros grandes seguidores estuvimos detrás de la exitosa broma del bloqueo bancario”.
Y luego, explica: “Lo que no es una broma, es que WikiLeaks se encuentra bajo la ilegal censura económica por parte de las instituciones financieras de EE.UU. Y NYTimes no dice nada. Ratas”.