En un extenso informe de 109 páginas, que fue dado a conocer al público el pasado domingo, se establece el amplio plan de EE.UU. para ampliar sus fuerzas en la región. Los posibles refuerzos están en consonancia con el plan estratégico lanzado por el presidente Barack Obama en enero pasado en el que llamó a “reequilibrar” las fuerzas militares de Estados Unidos en la región Asia-Pacífico.
En la actualidad, Guam alberga al escuadrón de submarinos número 15, que incluye tres submarinos nucleares del tipo Los Ángeles. El informe también sugiere movilizar una docena de bombarderos B-52 a la isla, poniendo fin a la necesidad actual de trasladar con regularidad a la escuadra a través de las bases de la Fuerza Aérea de los EE.UU. en la zona.
Sin embargo, serían necesarias mejoras de infraestructura y vivienda para dar cabida a los nuevos escuadrones.
Grandes planes, poco presupuesto
En el informe también se describe un plan para trasladar hasta 5.000 marines a Guam, aunque en un principio habrían sido proyectados 8.600, cifra que se vio afectada debido a los recortes en el presupuesto que han causado una reducción generalizada de tropas.
En la actualidad Guam alberga la Unidad Naval de Guerra Especial número Uno, que incluye a tres equipos de los Navy SEAL y un grupo especializado capacitado para desplegar las tropas tras las líneas enemigas. Si la Casa Blanca acepta las recomendaciones del CSIS, Guam podría convertirse en la pieza central de los planes de Obama para dirigir las fuerzas de Estados Unidos hacia el sur y el suroeste asiáticos.
Sin embargo, quedan abiertas la pregunta de cómo logrará EE.UU. reorientar sus fuerzas para contrarrestar una creciente China mientras el Pentágono se enfrenta a recortes de presupuesto de hasta 1 billón de dólares durante la próxima década.