El mandatario estadounidense ha señalado que el paquete de nuevas sanciones tiene carácter económico y persigue también endurecer las sanciones anteriores para impedir la venta de petróleo iraní.
Cualquier entidad o individuo que traten de apoyar a la Compañía Nacional Petrolera iraní o el Banco Central iraní estarán bajo las nuevas sanciones, ha declarado Obama. En particular, las nuevas medidas se han tomado contra el banco chino Kunlun y el banco islámico Elaf en Irak. La Casa Blanca acusa a estas organizaciones financieras de transacciones ilegales que ayudan a la "proliferación iraní".
"Desde que comenzamos nuestro mandato le presentamos a Irán una alternativa clara: cumple con tus obligaciones internacionales y reincorpórate a la comunidad de naciones o afronta unas consecuencias cada vez mayores", ha subrayado Obama.
El presidente norteamericano ha reiterado que "EE.UU. sigue comprometido con la búsqueda de una solución diplomática, pero es responsabilidad de Irán el cumplir con sus obligaciones internacionales".
Además, Obama ha advertido que si Teherán sigue con su postura, Occidente continuará aplicando sanciones cada vez más severas.
Anteriormente las dos cámaras del Congreso de EE.UU. acordaron un proyecto de ley para endurecer las sanciones contra Irán, que tiene que ser aprobado en la Cámara de Representantes y el Senado antes de finalizar esta semana.
¿Qué opinan los estadounidenses?
Un reciente sondeo llevado a cabo entre la sociedad norteamericana reveló que la aplastante mayoría de los estadounidenses (80%) cree que Irán representa una amenaza para su país, así como para sus aliados en la OTAN. Asimismo, el 87% de los ciudadanos norteamericanos considera a Irán como una amenaza real para Israel.
Entre tanto, el 78% de la población se ha mostrado a favor de la imposición de las sanciones más severas contra Irán, aunque la mayoría (el 67%) no cree que esas medidas y los esfuerzos diplomáticos den frutos significativos en la lucha contra la amenaza iraní.
Estos son los resultados de una encuesta realizada por el Instituto de Investigación de Opinión Pública. La encuesta fue encargada por la organización Israel Project con el objetivo de explicar los problemas que tienen que ver con Israel a los ciudadanos estadounidenses.