"Ha llegado el momento de una guerra total", declara Stay Shaffir, uno de los líderes del movimiento social contra la política gubernamental. "Tenemos que resistir y mostrar que sabemos unir nuestras manos cuando es necesario, para seguir luchando para salvar este país que amamos tanto".
Los activistas opositores, los movimientos sociales y los luchadores por la igualdad de la ley en el servicio militar en el Ejército unieron sus fuerzas en una gran protesta contra el Gobierno en Tel Aviv que se desencadenó este sábado. Entre tres y cinco mil manifestantes se reunieron frente al Museo de Tel Aviv. La zona fue rodeada por la Policía.
Una de las principales causas de la protesta son las recién medidas de autoridad aprobadas y el aumento de los impuestos. Además, los manifestantes exigen del gobierno un “justo reparto de los cargos militares”.
“Esta protesta no es sólo para los jóvenes”, dice Itzik Shmuli, el líder de la Union Nacional de los Estudiantes. “Es para todos aquellos que se sienten agobiados por carga económica, social y militar, para aquellos a quienes les importa qué pasará con país dentro de un año”.
"Las protestas de esta noche podrían ser un momento decisivo para el movimiento social, todo depende de la cantidad de israelíes que salga a las calles", escribió en su cuenta de Twitter la corresponsal de RT, Paula Slier, que se encuentra ahora en Tel Aviv.
Incertidumbre alrededor de la ley de servicio militar
El fracaso de Tel Aviv para alcanzar un compromiso sobre la cuestión del servicio militar obligatorio para los judíos ultraortodoxos y los árabes ha dado a luz una campaña por la igualdad en el derecho militar de Israel.La mayoría de los israelíes está obligada por ley a servir un periodo de dos a tres años en el Ejército después de cumplir 18 años. La llamada 'Tal Law', que durante 10 años había eximido a los árabes y a los judíos ultraortodoxos del servicio militar, expiró el 1 de agosto. De esta forma los activistas aumentan la presión sobre el Gobierno acerca de la cuestión.
Según los últimos sondeos, la popularidad del gobierno israelí ha caído hasta los índices más bajos debido al rumbo de su política. Un 60% de los consultados no se mostraron satisfechos con resultados del trabajo de Benjamin Netanyahu.
El movimiento de protesta contra la política gubernamental empezó en Israel hace un año. Sus participantes se oponen al crecimiento del costo de la vida y del alojamiento, exigen al Gobierno israelí más justicia social y una reducción del gasto militar. La difícil situación económica de Israel causa desesperación en la población llevando a los israelíes a tomar medidas extremas. En los últimos meses más de diez personas protagonizaron actos de inmolación en protesta contra la situación actual.