El accidente ha sucedido esta mañana (hora local) en el reactor número 4 de la planta. Según los expertos, ha caído agua en el generador eléctrico que suministra energía a la bomba del sistema de enfriamiento. Sin embargo, aseguran que lo ocurrido no ha influido en el funcionamiento del reactor, dado que los empleados de la central pusieron en marcha la bomba de reserva.
Los especialistas han logrado sacar el agua del generador y han determinado que dicho líquido no es radioactivo. Actualmente están examinando las causas del incidente.
La reactivación de la central nuclear de Oi se produjo en mayo de este año, después de que el Gobierno japonés ordenara reiniciar la actividad, ante la posibilidad de que la región de Kansai, donde se halla la planta, pudiera sufrir apagones por la falta de energía y el aumento de la demanda durante el verano.
Después de la reactivación, los técnicos observaron algunos fallos en el funcionamiento de la planta. El 16 de julio ya se produjo una primera alarma, cuando se detectó un elevado nivel de la presión en el sistema de refrigeración.
En todo Japón se produjo una ola de protestas por la decisión de las autoridades de volver a poner en marcha los reactores atómicos, que fueron cerrados tras el accidente en la central Fukushima 1 en marzo del 2011, cuando un terremoto ocasionó un mortífero tsunami. Los seis reactores de la planta resultaron afectados, dejando salir partículas radiactivas a la atmósfera y al océano.