“Me parece que están reaccionando demasiado ante una concesión de asilo que es un acto humanitario que está contemplado en la Convención de Viena, en los tratados de las Naciones Unidas, [...] que no debe ser tomada como un acto inamistoso sino como una acción humanitaria que no busca dañar las relaciones con otros países”, dijo a RT el periodista Santiago O´Donnell.
“Pero, lógicamente, hay países como EE.UU. cuyos gobiernos han demostrado una fuerte intención de derrotar a Assange y a WikiLeaks y que consideran que lo se hace allí son actividades criminales. Seguramente esta pelea seguirá”, agregó.
Ecuador otorgó este jueves asilo diplomático al fundador de WikiLeaks por considerar que puede ser víctima de una persecución política.
El fundador de WikiLeaks lucha por evitar la extradición a Suecia, donde es buscado para ser interrogado por presuntas agresiones sexuales a dos mujeres. Él niega las acusaciones y dice que el caso tiene motivaciones políticas.
Su abogado, Baltasar Garzón, está convencido de que la extradición a Suecia es en realidad una "excusa para juzgarle en EE.UU. por revelar informaciones que afectan a las instituciones norteamericanas".