“Todo el mundo sabe que los terroristas antisirios, en guerra contra el gobierno del presidente Bashar Al Assad, cuentan con el apoyo de Al Qaeda desde el primer día”, asegura Armesto, vicedecano del Colegio de Periodistas cubano-americanos.
“El Gobierno guerrerista de Barack Obama tiene conocimiento pleno de este apoyo y no tiene el menor inconveniente en apoyar a los terroristas antisirios”, dijo el experto a RT.
El experto asegura que “el gobierno norteamericano ha usado a Al Qaeda para sus fines políticos en Oriente Medio”. Es por ello que -según él- por un lado Washington pretende estar en contra de la organización terrorista, “pero por otro lado le abre las puertas”.
Armesto recalca que estos terroristas islámicos, respaldados por Washington, no desean la paz, sino que “buscan un baño de sangre en Siria”, así como imponer por medio de la violencia el fundamentalismo islámico en el país “contra los deseos del pueblo y contra los intereses del mundo libre”, apunta.
“El Gobierno de Assad es un Gobierno autoritario, pero los que quieren derrocarlo son unos carniceros, genocidas y terroristas”, concluye.
Por su parte, Estados Unidos niega cualquier vínculo con la organización, que califican de terrorista y a la que acusan de perpetrar los atentados del 11-S. Recientemente, el jefe de Inteligencia de EE.UU., James Clapper, confirmó que Al Qaeda extiende su influencia en Siria a través de Irak, donde Washington trataba de contrarrestarla, aunque sin resultados aparentes.
Al mismo tiempo, algunos de los insurgentes no dejan de pedir cada vez más armas a sus aliados occidentales para derrocar al régimen legítimo sirio, y aseguran que si el Occidente no les ayuda, pactarán una alianza con Al Qaeda.