Los hispanos reciben el año 2010 con esperanza
La comunidad hispana de Estados Unidos finaliza el año 2009 sin haber alcanzado una reforma integral de las leyes de inmigración. Hay muchas esperanzas para el año venidero, pero también muchas dudas sobre si por fin se podrá llevar a cabo.
Los hispanos constituyen un 15,4% de la población de Estados Unidos (casi 47 millones). La última década se demostró el poder electoral de esta comunidad, así como el crecimiento del mercado hispano y el aumento del número de hispanos en el sector político del país. Sin embargo, todavía queda mucho por lograr. Como indica Angelo Falcón, citado por el diario neoyorquino La Prensa, “tenemos los recursos, pero de alguna manera no hemos encontrado la forma de usarlos para ayudar al hispano común”.
La comunidad hispana sigue sufriendo los efectos de la crisis global, que por ejemplo disminuyó considerablemente una importante fuente de empleo para este colectivo: el sector de la construcción. El desempleo de los hispanos nacidos fuera de EE.UU. creció del 5,1%, en el último trimestre de 2007, a un 8% en el mismo periodo de 2008, según datos de La Prensa.
La última década fue bastante dura para los hispanos. Sufrieron discriminación y crímenes antiiinmigrantes. En el último año se registraron delitos racistas, denuncias de abusos de inmigrantes en el sistema carcelario, así como quejas por el nuevo sistema de seguridad en la frontera con México. La reforma es un símbolo de esperanza para esta comunidad.
Las marchas y un intenso debate político llevó al movimiento para reformar las leyes de inmigración a las más altas esferas del Gobierno.
El proyecto de ley, según el cual se legalizaría a unos 12 millones de indocumentados, ya se pasó al Senado en 2007, pero no avanzó debido a la falta de apoyo. En los últimos años, con otros graves problemas que afrontó el país, la cuestión de la reforma migratoria pasó a un segundo plano.
Según el congresista Luis Gutiérrez, quien introdujo este mes una propuesta legislativa de la reforma migratoria, sin los votos de la comunidad latina el presidente Barack Obama no hubiera sido elegido, y ahora los electores esperan que el jefe de Estado cumpla su promesa de la reforma. De momento, la propuesta para la misma tiene 87 patrocinadores.
Nydia Velázquez, la congresista que dirige ahora el Bloque Legislativo Hispano y se encarga de impulsar el debate de la reforma, no deja de expresar su optimismo. “Aunque nuestra comunidad continúa enfrentando desafíos, los hispanos se han asegurado un puesto en la mesa de negociaciones y desempeñan un papel clave en todos los debates importantes de nuestro país”, afirmó.
Sin embargo, con los problemas de economía y desempleo que atraviesa Estados Unidos, la aprobación de la reforma migratoria no será una cuestión que se resuelva con facilidad.