El terrorista será mantenido en el departamento de régimen especial. Por el momento Breivik es el único preso en Noruega con una condena tan severa.
“No recuerdo a ninguna otra persona que haya sido mantenida en una cárcel noruega en régimen especial tanto tiempo. Debemos compensarle de alguna manera su larga estancia en la prisión para que no se desarrolle ninguna desviación psíquica”, explica Knut Bjarkeid, el dirigente de la cárcel.
Breivik será mantenido en tres habitaciones: un dormitorio, un despacho y un gimnasio. Las autoridades del establecimiento permitirán recibir visitas al ultraderechista. Las visitas se permitirán una vez a la semana, durante una hora, y a través de un tabique transparente bajo el control del personal de la prisión.
Además, el terrorista podrá mantener correspondencia y enviar por correo los libros que escribirá. Sin embargo, el contenido de sus envíos será controlado por los agentes.
Probablemente, el preso también tendrá acceso a un ordenador portátil. Breivik ya utilizaba uno durante su detención preventiva, pero ahora la Policía tiene derecho a retirárselo. Aunque esa cuestión aún no está decidida.
El tribunal de Oslo condenó el pasado viernes a Anders Breivik a la pena máxima de 21 años de cárcel prorrogables, tras considerarlo penalmente responsable de cometer los atentados en julio del 2011 en Noruega, en los cuales fallecieron 77 personas.