El informe divulgado por la Organización no Gubernamental ‘Rompiendo el Silencio’ reúne más de 850 relatos de soldados y ex militares israelíes en los que describen abusos que ellos mismos cometieron, u otros de los que fueron testigos.
Según uno de los relatos, los soldados entraban en los pueblos diariamente para que los palestinos “sintieran nuestra presencia", bajo el pretexto de evitar acciones terroristas. "Era como si les ocupáramos, demostrándoles que es nuestra zona, no la suya”, reza el texto.
En estas situaciones es frecuente que los jóvenes palestinos empiecen a arrojar piedras contra los soldados, lo que sirve de pretexto a los jefes militares para disparar contra ellos, explicó un veterano, que añadió cómo en otra ocasión su oficial agarró a un chico de 12 años que supuestamente les había tirado piedras. "Le gritó que se callara. Evidentemente el niño estaba llorando y se hizo pis en los pantalones", relata.
El informe documenta numerosos casos de niños menores de 16 años detenidos a los que vendaron los ojos y privaron de comida y agua. Un sargento de la Brigada de Paracaidistas que ha detenido a gran cantidad de niños de entre 12 y 14 años, dice que le enseñaron a tratar a los niños no como lo que son, sino como compinches de los terroristas.
Además de asesinatos, arrestos ilegales y palizas, se revelaron muchos casos cuando los soldados utilizaban a niños palestinos como escudos humanos para verificar el contenido de unos bolsos aparentemente sospechosos de contener explosivos.
"Son escenas traumáticas que llevarán consigo toda su vida", reconoce otro ex soldado, que opera dentro y fuera de Israel y que tiene en su poder los testimonios de 30 ex militares israelíes. “El informe es muy importante y lo distribuiremos en los colegios", asegura el ex militar, que busca el modo de frenar los abusos cometidos contra menores palestinos
por el Ejército israelí.