Según el documento, desde mayo Irán ha duplicado el número de centrífugas en las plantas de Natanz y Fordo. No obstante, no especifica el número total de centrífugas instaladas. Los expertos del organismo creen que Irán se está preparando para aumentar aún más el volumen de enriquecimiento de uranio.
Precisamente la instalación de maquinarias en Fordo atrajo más atención de los expertos de la OIEA, por lo que pidieron a las autoridades iraníes poder acceder a "información adicional" en relación con "las discrepancias observadas entre la destinación declarada del objeto y su uso actual".
Según datos preliminares, el país islámico ya dispone de casi 190 kilos de uranio enriquecido al 20%, mientras en el informe de mayo se declararon 145 kilos. El volumen y la capacidad de enriquecer uranio aumentan gradualmente desde 2010, advierte el informe.
Se señala también que bajo la supervisión del OIEA, en general en Irán se encuentran 25 instalaciones que producen, almacenan o utilizan el material nuclear.
Debido a que Irán "no garantiza la cooperación adecuada" con el OIEA y no cumple con las exigencias internacionales, "la agencia no puede llegar a la conclusión de que todo el material nuclear de Irán se utiliza solo con fines pacíficos", subraya el informe.
A pesar de que desde enero de este año la república islámica y el OIEA discuten el polémico programa nuclear iraní, estos intentos no han avanzado.