Según informan las autoridades, la mayoría de las víctimas son trabajadores de la fábrica, ubicada en la ciudad de Sivakasi.
Los canales de televisión local muestran enormes nubes de humo que salen del complejo fabril, con ráfagas de petardos que se escuchan de fondo.
Los equipos de rescate utilizan camillas improvisadas para transportar a las víctimas a las ambulancias.
Por el momento la policía no ha podido determinar el número exacto de trabajadores que quedaron atrapados en el interior de la planta.
Se informa que en el momento de la explosión, unas 300 personas se encontraban dentro de la planta. Se trata de una de las mayores fábricas de fuegos artificiales del país.