Consultado sobre una declaración formulada por Chávez en julio pasado, cuando dijo que aconsejaba a Repsol que pensara muy bien una demanda contra el Estado argentino y le recomendó buscar un acuerdo amistoso, el director de la unidad de negocios Repsol Venezuela, Ramiro Páez, dijo entre risas a los periodistas que ya lo pensaron “muy bien”.
“Entonces vino nuestro presidente de Repsol (Antonio Brufau) y le explicó y el presidente Chávez también se ofreció (…) a interceder para entablar un diálogo con el Gobierno argentino”, agregó en referencia a una reunión sostenida por el máximo responsable de la petrolera y el gobernante el mes pasado.
Chávez se declaró en julio “muy extrañado” después de que, según dijo, leyera que Repsol demandaría a Argentina en un tribunal en Nueva York.
“Yo, si me permite Repsol algún consejo, les aconsejaría que lo pensaran muy bien, porque deberían buscar un acuerdo amistoso con un país hermano de nosotros”, puntualizó entonces el presidente venezolano.
El pasado 10 de agosto, tras la reunión con Brufau, Chávez manifestó su alegría por la visita del ejecutivo español y descartó la salida de la compañía española del negocio en Venezuela.
El Gobierno argentino expropió en mayo a Repsol el 51% de las acciones que tenía en la petrolera argentina YPF.
Repsol tiene importantes intereses en Venezuela, especialmente en el sector del gas, en el que trabaja de manera conjunta con italiana Eni y la estatal Petróleos de Venezuela en el proyecto gasífero Rafael Urdaneta, en donde se ha hallado uno de los mayores yacimientos de gas del mundo.