Según la demanda, presentada ante un tribunal de Chicago por las organizaciones Víctimas del genocidio en Krajina y Unión de los serbios de Krajina, MPRI es responsable de “los asesinatos masivos de los serbios de Croacia y su expulsión de los lugares de residencia históricos” durante la operación militar 'Oluja' ('Tormenta' en serbio), llevada a cabo por las fuerzas croatas en 1995 en el territorio de la autoproclamada República Serbia de Krajina, con mayoría de población de origen serbio, prácticamente poniendo fin a la existencia de dicha República.
Los especialistas de MPRI adiestraron a los militares croatas antes de la realización de esta operación. Para demostrarlo, las ONG serbias presentaron al juzgado una copia del contrato de adiestramiento de los soldados y oficiales croatas firmado por MPRI y las autoridades croatas a principios de los 90.
La suma demandada está vinculada con la cantidad de serbios croatas desplazados forzosamente del territorio de Croacia durante el conflicto. En total han sido al menos 200.000 personas y los demandantes exigen una recompensa de 25.000 dólares por cada serbio que fue expulsado de Croacia.
Un portavoz de MPRI señaló al diario que la compañía no está de acuerdo con la demanda, ya que la colaboración de MPRI con Croacia en los 90 no incumplía las sanciones de la ONU impuestas a ese país durante el conflicto en los Balcanes.
“Es ridículo culpar a solo una empresa por una operación como ´Oluja´”, señaló. El representante de MPRI afirmó también que “los altos mandos militares estaban implicados en la preparación de dicha operación”. Asimismo destacó que fue el entonces presidente de EE.UU. Bill Clinton el que dio “luz verde” para el inicio de la operación al líder de Croacia Franjo Tudjman.