"La actitud hostil del actual Gobierno racista canadiense está ciertamente en línea con la política dictada por el régimen sionista de Israel y el Reino Unido", proclamó el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Ramin Mehmanparast.
Las declaraciones por parte del Gobierno iraní se deben a la ruptura unilateral de relaciones diplomáticas decretada este viernes por Ottawa, que cerró su embajada en Teherán y expulsó a los diplomáticos iraníes de su territorio.
Según el portavoz diplomático iraní, la suspensión de las relaciones por parte de Canadá representa la "continuación de la política contra Irán" y una "obvia violación de la legislación internacional”.
"El cierre de la sección de visados en Teherán, la congelación de cuentas bancarias de ciudadanos iraníes que viven en Canadá y la prohibición de transferir dinero a estudiantes iraníes en ese país están entre las numerosas medidas hostiles del Gobierno canadiense contra Irán y la comunidad iraní en Canadá", especificó el portavoz.
El controvertido programa nuclear iraní causa inquietud en el mundo occidental. EE.UU., junto con sus aliados europeos e Israel, están acusando a Irán de desarrollar una bomba atómica, hecho que Teherán siempre ha negado, afirmando que su programa tiene objetivos puramente pacíficos, de carácter energético, y no militares.