No es el primer caso en el que se han podido observar formaciones nubosas de ese tipo. Las nubes platillos ya han sido detectadas en México, España y otras partes del mundo. A primera vista, a alguno le podrían parecer una invasión de ovnis, pero no hay que preocuparse: no son más que nubes sobre unas montañas. Muy a menudo esas formaciones nubosas se perciben como ovnis por su forma de platillo y el brillo de color naranja, supuestamente típico de los objetos voladores.
A pesar de su apariencia siniestra, las nubes no son más que un fenómeno de la naturaleza. Se forman cuando el aire húmedo fluye sobre las zonas montañosas. Los montañistas las consideran presagio de tormenta.
Para los residentes de las zonas montañosas, las nubes lenticulares son bastante comunes. Pero para los visitantes que las ven por primera vez son una gran sorpresa.