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La guerra en Afganistán costó la vida a 2.000 soldados de EE.UU.
Con las últimas muertes confirmadas de los soldados estadounidenses en Afganistán, la tasa mortal alcanza las dos mil personas.
Este domingo el Pentágono confirmó la muerte de un militar en el este de Afganistán, que contabiliza la víctima número 2.000, según la agencia AP, desde el inicio de la operación 'Libertad Duradera' en 2001.
Según el informe oficial del Departamento de Defensa de EE.UU. publicado el 27 de septiembre, en los once años de campaña militar han fallecido 1.996 soldados, 1.657 de ellos en combate. Además, 17.644 militares fueron heridos a lo largo de la operación militar.
El centro de investigación Brooking Institution estima en su último informe que el 40,2% de las muertes se produjo como resultado de las explosiones de bombas artesanales, y el 30,3% en tiroteos.
Mientras tanto, según los datos de la organización independiente iCasualities, que hace cálculos de los soldados perecidos en las campañas militares en Irak y Afganistán, el saldo de muertos alcanza una cifra de 2.125 personas. El mayor número de muertes, 499 soldados estadounidenses, se produjo en 2011.
La operación 'Libertad Duradera' no solo se lleva a cabo en Afganistán, sino también en Filipinas, África y otras partes del mundo. En total, según el mismo estudio del Pentágono, 2.117 soldados estadounidenses murieron durante su realización.
La retirada de los tropas extranjeras de Afganistán está prevista para finales de 2014, pero EE.UU. mantendrá una reducida presencia militar en el país después del retiro. Se trata en primer lugar de soldados que se encargarán de la seguridad de las delegaciones estadounidenses, así como de especialistas para entrenar a los agentes afganos y de asesores civiles.
Según el informe oficial del Departamento de Defensa de EE.UU. publicado el 27 de septiembre, en los once años de campaña militar han fallecido 1.996 soldados, 1.657 de ellos en combate. Además, 17.644 militares fueron heridos a lo largo de la operación militar.
El centro de investigación Brooking Institution estima en su último informe que el 40,2% de las muertes se produjo como resultado de las explosiones de bombas artesanales, y el 30,3% en tiroteos.
Mientras tanto, según los datos de la organización independiente iCasualities, que hace cálculos de los soldados perecidos en las campañas militares en Irak y Afganistán, el saldo de muertos alcanza una cifra de 2.125 personas. El mayor número de muertes, 499 soldados estadounidenses, se produjo en 2011.
La operación 'Libertad Duradera' no solo se lleva a cabo en Afganistán, sino también en Filipinas, África y otras partes del mundo. En total, según el mismo estudio del Pentágono, 2.117 soldados estadounidenses murieron durante su realización.
La retirada de los tropas extranjeras de Afganistán está prevista para finales de 2014, pero EE.UU. mantendrá una reducida presencia militar en el país después del retiro. Se trata en primer lugar de soldados que se encargarán de la seguridad de las delegaciones estadounidenses, así como de especialistas para entrenar a los agentes afganos y de asesores civiles.
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